Gianluca Di Battista apostó a la producción de granadas. Inició su proyecto con 400 plantas divididas en dos chacras de Allen. En La Carretera, señaló que el fruto tiene mucho potencial. Puede comercializarse como alimento, en la industria farmacéutica o para dulces y bebidas. Gianluca aseguró que no hay otro proyecto similar en el sur del país. Agradeció el respaldo logístico que recibió para desarrollar la marca ‘Granadas de la Patagonia’.

“Este emprendimiento surgió a raíz de la necesidad de renovar la matriz productiva y de buscar alternativas al monocultivo de peras y manzanas. Dentro del estudio de mercado, nos pareció interesante lo de las granadas y comenzamos esta aventura”, dijo Gianluca. La producción está en las chacras 59 y 123, con un cultivo piloto de 400 plantas. Los primeros frutos llegarán dentro de 4 años. “La técnica de trabajo es exactamente la misma que la pera y la manzana. Somos pioneros en un cultivo intensivo de granada en espaldera. En Argentina esto no existe”, sostuvo.

Gianluca explicó que las tareas culturales son iguales a las de otras frutas de pepita. “La gran ventaja es que se cosecha en mayo, cuando terminamos de cosechar la Pink Lady, o sea, extendemos la cosecha un mes más”, indicó. El suelo y clima valletanos son muy favorables para esta plantación. “Tengo entendido que somos los primeros en hacerlo en la Patagonia, es decir, serían las granadas más australes del mundo. Estoy en contacto con SENASA y con la Secretaría de Fruticultura y no tienen registros”, expresó con orgullo. Haciendo énfasis en la región, el nombre comercial elegido es ‘Granadas de la Patagonia‘.

“Plantamos Wonderful, una variedad que cada granada pesa alrededor de medio kilo, tiene un color rojo muy intenso y un sabor dulce. Tenemos tres ideas, la primera es dedicarnos al mercado interno, dedicarnos a la exportación y en última instancia, poder producir los desgranulados, que se vende en paquete solamente los granos y la cáscara se destina al uso farmacéutico. Tiene un potencial enorme la granada“, remarcó. Cada planta da unos 40 kilos de frutos. Para lanzarse en este emprendimiento, Gianluca contó con apoyo técnico y logístico del municipio y el gobierno provincial.