El Ministerio de Salud de Río Negro suma esfuerzos para tratar de controlar el avance de la pandemia. En el Alto Valle, los casos se multiplican todos los días. El sistema sanitario está saturado y se ha colmado la capacidad de terapia intensiva. En La Carretera, la doctora Mercedes Iberó, definió la situación como crítica. “Hay muchísimos casos todavía y esperamos que en algún momento empiecen a bajar los números”, aseveró.

“Yo creo que todos somos parte de lo que está pasando. Hay un montón de razones por las cuales los casos suben: primero hay circulación viral; luego, llevamos muchos meses de escuchar lo mismo, muchos piensan que es un resfrío común; la gente está muy cansada”.

Con respecto a la apertura de la mayoría de las actividades económicas, la doctora Iberó aseguró que no está en contra. “Creo que la gente necesita de lo económico, lo social, lo psicológico, pero quizás todavía no terminamos de entender que, con mantener la distancia, usar tapabocas y alcohol en gel, no nos vamos a contagiar”.

La profesional del ministerio de salud también remarcó que hay mucha gente que cree que no le va a pasar nada. “Hay personas que tienen síntomas leves y no los relacionan con coronavirus, piensan que es un resfrío o una alergia, entonces se juntan, toman mate y contagian”, ejemplificó.

Al respecto, sostuvo que el personal de salud busca al paciente que tiene síntomas para que se aísle. “Lo malo que tenemos nosotros como provincia en general, es que en los lugares donde se sale a buscar al positivo o al contacto estrecho, el 40 % no está en su casa cumpliendo con lo aconsejable”.

Hay muchas cosas que aún no se conocen sobre el Covid-19 como el proceso de reinfección, cuánto dura la inmunidad y los anticuerpos. “Lo malo de este virus es que pone en juego al sistema de salud, porque nos contagiamos todos a la vez”, explicó Iberó. Lamentó que la gente tome conciencia recién cuando le toca a un familiar cercano y requiere del uso de un respirador.