Corría el año 1956 en Cipolletti, cuando un grupo de mujeres de la comunidad, incluidas las esposas de los médicos del hospital rural y de protección a la infancia, comenzó a reunir ropa, calzado y mantas para las familias hospitalizadas más carenciadas.

Desde aquel entonces esa comisión de ayuda, hoy constituida legalmente como la asociación cooperadora del hospital Pedro Moguillansky, sigue trabajando incansablemente movilizada por el compromiso, la salud y la solidaridad.

La presidenta de la cooperadora María Cristina Pardo, recordó la labor que realizó el reconocido doctor Tomás Herczeg y su esposa Nilda al servicio del sistema de salud cipoleño. “Mi marido llegaba a casa, revisaba la alacena y preguntaba lo que había para llevar al los pacientes del hospital”, comentó Cristina en relación a Nilda.

Las “damas” de la asociación ayudaron a los médicos y al personal de salud a batallar contra la Poliomielitis, la epidemia que causó estragos en Argentina en la década del 50, con 6.496 infecciones que causaron la muerte o discapacidad en niños de hasta 14 años. Hoy a mas de 60 años volvieron a acompañar con su trabajo a los pacientes con coronavirus, la mayor pandemia mundial.

“Fue un año de mucho trabajo, gracias a la comunidad. Ya llevamos aportados 3 millones de pesos. La asociación cooperadora es respaldada por empresas, comerciantes y particulares, pero siempre estamos pidiendo lo mismo, por eso pedimos que inviertan más en salud” finalizó Cristina Pardo.