El gerente ejecutivo de la Cámara Argentina de Productores de Cereza Integrados (Capci), Anibal Caminiti, aseguró a La Carretera que “no sólo estamos con cosecha completa en la temporada sino que algunas parcelas este año están con mayor productividad, así que la región tendrá producción y volúmenes exportables superiores a temporadas anteriores”.

Destacó que esta realidad se logra con la inversión realizada por los productores, puesto que para superar las contingencias climáticas (heladas, granizo o lluvias en cosecha) hay que aplicar toda la tecnología disponible y esas son decisiones que significan un importante caudal de dinero puesto en la producción.

“Un negocio de escala y de exportación necesita tener toda la tecnología de punta para poder hacer frente a un negocio de estas dimensiones” completó.

Las perspectivas de comercialización son buenas, existe una demanda sostenida y a buenos precios, pero la realidad Argentina hace que no se pueda lograr la rentabilidad de otros países como Chile, puesto que los costos de producción y comercialización son aquí mucho más elevados.

“A la presión impositiva hay que sumarle la energía, la mano de obra, lo derechos de exportación y los aranceles que paga nuestro país y otros países no los tienen puesto que han logrado acuerdos bilaterales con los países que importan la fruta” explicó el entrevistado durante el micro de producción de Raúl Ferragut.

Aníbal Caminiti pudo como ejemplo el esfuerzo que se hizo para abrir el mercado de Tailandia. Se logró avanzar con todo lo relacionados a las exigencias fitosanitarias, pero resulta que Argentina tiene que afrontar aranceles del 40%, algo que hace imposible cualquier negocio. “Hace dos años que ese mercado está abierto y no se ha podido exporta ni una cereza” agregó.

Pese a esto son importantes los avances en China y la consolidación de otros más tradicionales.

“Lamentablemente no tenemos una política que fomente la exportación de frutas. Hace una década exportábamos  1.500 millones dólares,  el año pasado se exportó fruta argentina por un valor de 690 millones de la moneda norteamericana, menos de la mitad” cerró.