El 2 de enero, el cuartel de bomberos de la ciudad de Allen cumplió 66 años de vida. La institución fue fundada en  1955. En La Carretera, dialogamos con el presidente de la asociación de bomberos voluntarios, Silvio San Segundo. El dirigente habló sobre el significado de la jornada y sobre un festejo que quedó trunco.

“Fue un día normal por el contexto de pandemia que estamos viviendo, no hubo lugar para festejos”, indicó. Recordó que la fecha es bastante particular por estar cerca de la celebración de fin de año. “Por lo general, los festejos más significativos se realizan el 2 de junio, día del bombero voluntario”, afirmó.

Durante la entrevista, Silvio San Segundo rememoró el paso de su padre por la asociación. “Mi viejo estuvo desde el año 1973 hasta el 1990 que se retiró. Fue bastante difícil para él estar fuera del cuartel. Teníamos la suerte o “desgracia” de vivir a media cuadra. Para él era muy difícil pasar por ahí. Yo no sé como va a ser el día que yo me vaya” dijo.

En el 2005, Luis San Segundo volvió ocupar la presidencia como interventor ante un panorama irregular. Ocupó el cargo hasta su fallecimiento en 2007. Un año más tarde, su hijo asumió al frente de la Asociación de Bomberos Voluntarios.

“Hay que seguir adelante con los proyectos bien en claro. Yo me críe acá adentro. Conozco estas paredes como nadie. Siempre teniendo en la mente que es la institución la que tiene que crecer y mantenerse sana. Esa es la impronta que le he dado al cuartel”, sintetizó.