Un joven de Allen se inició en el voluntariado a través de una ONG. Vio un documental sobre las comunidades del Norte Argentino y se anotó para ayudar a “Redes Solidarias”. A finales de 2020 lo convocaron para un viaje único. Facundo D’Amico estuvo varias semanas en el corazón del Impenetrable Chacosalteño. Convivió con la comunidad aborigen ‘La Estrella’ de Salta. En La Carretera, confesó que fue con la idea de enseñar y volvió con un profundo aprendizaje.

Facundo tiene 24 años y siempre se interesó en ayudar a los demás. Durante la cuarentena, un video de YouTube le despertó la curiosidad y decidió averiguar sobre el Impenetrable. La ONG Redes Solidarias lo sumó a una de sus misiones y él no dudó en aprovechar la oportunidad. “Vi un documental que se llama ‘Hambre de Futuro’ que muestra la situación de las comunidades aborígenes. Me comuniqué con la organización de Buenos Aires que brinda asistencia y a los meses me llamaron. Me dijeron que había un grupo de voluntarios que iba a ir y dije que sí“, explicó.

“Trabajo en el empaque en la temporada y me interesan los voluntariados, brindar tiempo y ganas para ayudar un poco. Llegué justito, me vine volando porque en el galpón empezamos ayer. Y volvés diferente, siendo otra persona, conociendo otra realidad. Lo recomiendo, que se comuniquen con Redes Solidarias. Uno se da cuenta que con pequeñas ayudas pero de muchas personas les podemos dar oportunidades a esta gente que está medio olvidada”, reflexionó. “No hay señal de internet, no hay teléfono, hay agua a veces. Llevamos donaciones y compartimos con ellos, hacía más de un año que nadie los visitaba. Necesitaban compartir. Ellos no salen de ahí”, agregó.

Facundo aseguró que seguirá colaborando con la ONG. “Me vuelvo contento, vi el trabajo de la fundación. Hace 3 años creció el río Pilcomayo y destruyó todo. Se quedaron sin nada y se respondió rápido para construir casas y que en caso de otra inundación, sobreviva un poco más”, dijo. “A veces nos quejamos de cosas que son tonteras. Uno conociendo otras realidades, valora lo que tiene. Desde una ducha caliente hasta un plato de comida. A mi este viaje me ayudó un montón, me ha hecho crecer como persona. Uno piensa que va a dar y a enseñar y es al revés, uno se vuelve con mucha experiencia, mucho cariño. El que termina aprendiendo siempre es uno. Te cambia la vida”, sentenció el allense.

Para conocer la ONG: redes-solidarias.org.ar