Ayer el Concejo Deliberante de Allen volvió a debatir el Masterplan. El proyecto planifica un desarrollo urbanístico de las hectáreas improductivas al norte de la ciudad. La votación de los ediles fue dividida y se forzó un desempate con el voto doble del presidente del cuerpo, Mauricio Morales. Esta mañana, la intendente Liliana Martín opinó sobre la jornada en el poder legislativo. Cuestionó la posición de algunos concejales.

“Siento tranquilidad, porque hemos concretado este primer avance sobre el Masterplan. El Masterplan recién empieza, tiene que ver con lo que vamos a hacer de aquí en adelante. Tenemos muchas tareas por realizar y estamos en la definición de los tiempos para darles certezas a las personas”, sostuvo Martín. “Vamos a hacer una revisión exhaustiva porque son muchas las obras. Pero va a hacer lo más pronto posible“, aclaró. La intendente señaló que una vez que la ordenanza se promulgue, el municipio entregará la posesión a la gente beneficiada. “Tenemos que definir la ubicación física de cada lote, quién es el dueño de cada lote”, indicó.

Para que las familias puedan ubicarse en el sector que les toque habrá que esperar. El municipio debe primero abrir las calles internas y proveer los servicios básicos. “A partir de ahí pensamos en otra infraestructura, pero lo primero es calles, agua y luz. El Masterplan tiene proyectada obras de nexos para conectar toda esa nueva área a la ya existente. Necesita conexiones específicas”, explicó. “Tenemos que pensar también en la infraestructura de los lotes municipales que serán destinados al IMUVI, loteos sociales y sindicatos”, detalló. Muchas de las tareas ya están en gestión en el gobierno provincial.

Más allá de la alegría de avanzar con el proyecto, Martín reflexionó sobre los obstáculos en el Concejo Deliberante. “Había un posicionamiento previo a la discusión del Masterplan, un posicionamiento personal de cada uno de los concejales. A algunos, dijera lo que dijera el Masterplan… no les iba a servir. Porque no están de acuerdo con la distribución gratuita de la tierra, no están de acuerdo con que el estado se comprometa a hacer obras. No alcanzaron a ver el respaldo financiero del proyecto. O no quisieron verlo”, dijo Martín. “Me llama la atención los votos tan condicionados, porque es un proyecto urbanístico realmente innovador. Hay un prejuicio previo y es incómodo que las decisiones de la ciudad tengan que ver con prejuicios“, agregó. Además, la intendente señaló que el proyecto dejó “fascinados” a los miembros del gobierno provincial.