Sebastien Ogier tuvo un comienzo demoledor en el mítico Rally de Montecarlo, la primera fecha del WRC, lo que le permitió cerrar la etapa inicial como líder de la general y con una interesante ventaja en relación con sus principales rivales, comandando el doblete de Toyota con los rendidores Yaris, que dejaron en el tercer lugar al más destacado de los pilotos de Hyundai y más atrás a los Puma.

Ogier mostró sus intenciones de ganar por novena vez la legendaria prueba en Montecarlo, donde iguala el récord con Sebastien Loeb, en el shakedown y después lo ratificó en buena parte de la primera etapa. El múltiple campeón del mundo fue implacable hasta antes de encarar los tres tramos finales, en los que manejó la ventaja con Kalle Rovanpera, su compañero de equipo.

“Tengo muy buenas sensaciones, muy conforme con el ritmo que mantuvimos y con el rendimiento que tuvo el auto en la primera etapa, lo que fue decisivo para lograr la victoria, aunque todavía falta mucho, es una prueba muy exigente, que no perdona los errores”, destacó Ogier, quien se ilusiona con lograr el récord de victorias en el Rally de Montecarlo.

Ogier superó a su compañero de equipo y figura Rovanpera, quien es el campeón del WRC, por 36 segundos. Después, Thierry Neuville, con el mejor de los Hyundai, a 37s 9/10; Ott Tanak, en su estreno con uno de los Puma, a 54s 2/10; Elfyn Evans, con otro Yaris que pagó caro la rotura de un neumático cuando peleaba adelante, a 1m 02s 3/10, y Dani Sordo, Hyundai, a 1m 30s 2/10.

Evans quedó muy enojado porque un neumático roto cuando peleaba adelante con sus compañeros del equipo Toyota le hizo perder unos 40 segundos y Sordo se mostró desconcertado con el rendimiento de su auto, porque aseguró que “no puedo andar más rápido”, pero quedó muy lejos del líder del Rally de Montecarlo, que mañana tendrá su continuidad con la segunda etapa, que contará con seis tramos de velocidad que pueden ser decisivos.