Las paritarias del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa son seguidas de cerca, no solo por los directamente involucrados en las negociaciones, sino también por el resto de las actividades laborales, ya que lo que los petroleros consiguen establece un referente máximo para otros sectores.

En las últimas negociaciones, el sindicato logró un acuerdo salarial paritario que establece un incremento mínimo del 107,5 % para el año en curso. El acuerdo contempla aumentos del 10 % para julio y agosto, y un aumento del 7,5 % para septiembre. Además, se acordó llevar a cabo una revisión semestral el 15 de octubre y otra revisión el 1 de abril de 2024.

Marcelo Rucci, el líder del gremio, expresó en una entrevista en La Carretera que “hemos logrado cerrar una muy buena paritaria, considerando que nuestras demandas eran totalmente justas. En un contexto económico con una inflación muy alta, pudimos proteger el salario de los trabajadores. No fue una tarea fácil, pero logramos cerrarlo y ahora se puede implementar. Siempre hemos defendido nuestra posición con argumentos sólidos. Hemos realizado grandes esfuerzos por la industria y hoy la actividad se encuentra en una situación en la que es prácticamente obligatorio reconocer el esfuerzo de nuestros compañeros. Esperaremos hasta abril, aunque contamos con dos cláusulas de transición en caso de que la inflación se descontrole, lo cual nos brinda cierta tranquilidad. Creo que hemos cerrado esta paritaria de manera satisfactoria”.

En una semana en la que el tema energético ocupa un lugar central debido a la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner, el dirigente sindical destacó que “esto nos brinda la oportunidad de dejar de importar gas y petróleo de otros países. Solamente en gas, teníamos un déficit de 8 mil millones de dólares. A partir de ahora y en esta primera etapa, estaremos ahorrando alrededor de 2.500 millones de dólares. Más allá del nombre que se le dé a este logro, es de suma importancia para los argentinos. Ojalá se hubiera realizado antes, así no estaríamos sufriendo por los malos gobiernos que hemos tenido”.

Por último, en relación a las próximas elecciones y su postura ante las precandidaturas, Rucci declaró: “Mi principal preocupación es saber qué planes tienen para la actividad petrolera. Defiendo los intereses de los trabajadores, no los intereses políticos. Hasta ahora, no he tenido conversaciones con ningún candidato, así que no he tomado una posición definitiva. Siempre sostengo que los trabajadores no deben ser la variable de ajuste de las malas administraciones. Hoy en día, los mejores activos que tienen las empresas de Vaca Muerta son sus trabajadores. Pueden enorgullecerse de triplicar la producción, de establecer récords en fracturación y perforación, y eso es gracias al esfuerzo de las personas que trabajan arduamente, con jornadas laborales de 12 horas y 4 horas de viaje. Si es necesario realizar ajustes, no deberían afectar a los trabajadores”.