NEUQUÉN: ES LEY LA CONSULTA PREVIA A LAS COMUNIDADES ORIGINARIAS PARA REALIZAR OBRAS EN TERRITORIOS ANCESTRALES

En la Legislatura de Neuquén se aprobó, por unanimidad, una ley que pone en funcionamiento la consulta previa a los pueblos originarios establecida en el Convenio 169 de la OIT. La ley establece que se debe realizar antes de que se realice alguna obra que afecte a los territorios de las comunidades mapuches. Esto implica también el reconocimiento a los pueblos ancestrales y su preexistencia.

Consultado por La Carretera, el diputado provincial de UNE, Mariano Mansilla, de amplia trayectoria en la defensa de los pueblos originarios, afirmó que “esto implica poner operativo el convenio de la OIT (Organización Internacional del Trabajo). Es un convenio que intenta revertir las situaciones de genocidio, de matanza que han sufrido los pueblos originarios en todo el mundo, de los que nosotros también venimos. Esto busca proteger nuestra historia, nuestra cultura”.

Por otra parte, Mansilla explicó que “cuando decidimos que se haga una escuela en una localidad, a esa localidad le consultamos. Ellos deciden qué les conviene hacer, cómo se lleva adelante. Ahora va a pasar lo mismo pero con estas comunidades. La comunidad va a ser consultada y va a poder opinar”. En ese sentido, reconoció que “el tema petrolero es el gran tema. En la zona hay muchos gasoductos. Pero se aplica el derecho argentino. A una obra pública no se puede oponer una comunidad. La consulta no es vinculante. Se informa a la comunidad, y se decide en conjunto. Pero si la obra es del orden público, se va a hacer igual”.

Por otra parte, se refirió a los requisitos que se exigen para invocar ser propietarios de tierras ancestrales. Detalló que “ellos tienen los títulos sobre esas tierras. Es comunitaria, es decir que no se les da el título de propiedad individualmente a los que la integran, pero a los fines jurídicos, es lo mismo”.

Otro punto que generaba resistencia, tenía que ver con aquellos casos en que algunas personas se presentan como integrantes de pueblos originarios, pero sin acreditar tal condición. Mansilla aclaró que “las comunidades originarias son muy respetuosas. Pero hay vivos, como en todos lados, que quieren cobrar, pero eso es algo fácilmente rebatible porque hay una inscripción previa. Tienen que tener los títulos de la tierras. No cualquiera puede invocar la propiedad de esas tierras. La Nación tiene un registro que autoriza y controla los papeles de esa comunidad” finalizó.