Por mayoría, se aprobó la ley de Emergencia Sanitaria en el sistema público de salud de Neuquén. Fueron 32 votos a favor de la norma 3422 que tuvo modificaciones vinculadas a la composición y a las funciones del comité de emergencia previsto en la propuesta original. Según el oficialismo la iniciativa permitirá agilizar la compra de insumos y medicamentos para atender la situación crítica del sistema.
Comunidad, Avanzar, MPN, Juntos, PRO-NCN, Cumplir, Neuquén Federal, Arriba Neuquén, FdT Neuquino y Juntos por el Cambio NQN-UCR votaron a favor de la Emergencia Sanitaria. Los bloques PTS-FIT-U y FIT-U votaron en forma negativa. Los diputados provinciales aprobaron la ley que declara la emergencia sanitaria por un año, con posibilidad de prorrogarla por un plazo similar.
También otorga facultades especiales al Poder Ejecutivo para adquirir por contratación directa bienes, servicios e insumos necesarios para garantizar el acceso a la salud, previo informe fundado, con independencia de su monto, en forma excepcional y mientras dure la emergencia. A partir de su implementación, se crea un comité de emergencia que deberá elevar un informe a la Legislatura, cada 45 días, sobre las condiciones sanitarias, provisión de insumos, mantenimiento del equipamiento y necesidades detectadas.
Francisco Lépore, diputado por Avanzar, mencionó que la deuda con proveedores asciende a 11.400 millones de pesos y, conjugada con los índices inflacionarios, dificulta el acceso a tiempo a los medicamentos. El legislador remarcó que la falta de insumos y medicamentos “colisiona con el acceso a la salud de la población”. En ese mismo sentido, Claudio Domínguez, del MPN, se pronunció a favor de “darle herramientas al Poder Ejecutivo”, e hizo referencia a la posibilidad de autorizar al Ejecutivo a utilizar el fondo de estabilización y desarrollo de Neuquén que –dijo- cuenta actualmente con 40 millones de dólares.
Por el PRO-NCN, Marcelo Bermúdez consideró que el título de la ley tiene un error conceptual. “Acá no hay una emergencia sanitaria, acá lo que hay es una emergencia económica – financiera del servicio de salud estatal”, expuso y lo diferenció del sistema de salud privado al que calificó de “altísima calidad”.
Lorena Parrilli (FdT) enfatizó en la necesidad de establecer mecanismos de control en la ley de emergencia y de convocar a los médicos. Durante el tratamiento en particular, su compañero de bloque Darío Peralta propuso que el plazo de la emergencia se acote a 180 días con posibilidad de prorrogarla por igual período, pero el planteo no obtuvo respaldo.
Por el PTS-FIT-U, Andrés Blanco advirtió que la ley no aborda la crisis sanitaria sino que le otorga “una chequera en blanco” al ministro de Salud y criticó que no se haya convocado a los trabajadores y trabajadoras del sector. En tanto, la diputada Gabriela Suppicich (FIT-U) puntualizó en la falta de investigación de los responsables que generaron la deuda del sector y resaltó que la ley habilita un cheque blanco.