El diputado Luis Di Giacomo repasó el conflicto en Villa Mascardi. Afirmó que el tema de pueblos originarios es sensible y afecta la intervención del Estado. El roquense remarcó que no se pueden justificar los actos violentos de un grupo de personas encapuchadas. En La Carretera, cuestionó el rol de las autoridades nacionales. Pidió que dialoguen con todas las partes y asuman una mirada realista del problema.
“Se está manejando con poca profesionalidad porque la seguridad tiene pasos y procedimientos que se deben realizar, por ajustarse a la ley, por hacer una correcta lectura del problema. Cuando hablamos de usurpación podemos hablar de un problema habitacional, de un comercio inmobiliario o de intereses políticos. En este caso hablamos de que está ligado a un grupo de ideología violenta, que no tienen nada que ver con las comunidades mapuches”, expresó Di Giácomo. “Hay un componente ideológico organizacional, de desconocimiento de las leyes, y la reivindicación de hacer lo que se les ocurre hacer. No se puede atender como un problemita menor. Este grupo es nada más que una familia violenta organizada, que está ideológicamente consustanciada con lo que se propone de la araucanía chilena”, sostuvo.
En La Carretera, el diputado consideró que la actitud de las funcionarias nacionales no es la correcta. “La ministra Frederic tiene una visión que dista de ser operativa en la realidad. Su pensamiento filosófico es muy bueno para la universidad, pero puesto frente a la realidad, no puede resolver los temas. Ella se comprometió y pidió tiempo. Le pedimos que no dialogue nada más con este grupo. Dialoguen con la gente común. Dialoguen cara a cara con todos sino es el mundo del revés. Ponemos en víctimas a los victimarios“, argumentó. “Es el difícil arte de la conducción, de la política, de la resolución de conflictos en forma pacífica. Juegan situaciones hasta de burocracia, es zona de frontera, es un parque nacional donde la provincia no puede actuar. Se entremezclan y superponen jurisdicciones“, agregó.
Además, el diputado indicó que el tema de pueblos originarios es muy sensible. “Se presta a solidaridades, de gente que no entiende bien la cosa. Genera movimientos a nivel comunicacional. El gobierno está en una encrucijada pero hay que resolverlo de alguna manera. Están en puja socialmente el derecho y el deber de cada uno. Y el estatuto legal debe regularlo, sino cada uno hace lo que quiere. La ley debería hacerse cumplir de alguna forma”, sentenció.
