Ni bien se conoció el anuncio del gobernador de Neuquén Omar Gutiérrez de permitir los actos de fin de año aunque con rigurosos protocolos, el gremio docente salió al cruce y repudió la decisión de la provincia.
El secretario general Marcelo Guagliardo expresó que “es un anuncio que está desapegado de la realidad. Desde hace 8 meses están suspendidas las actividades en las escuelas. En los últimos 3 meses se agravó la situación sanitaria en toda la provincia, muchas ciudades con circulación comunitaria del virus, no mejoró ningún indicador de los que nos obligó al aislamiento y al distanciamiento social. Si nada cambió no se entiende como el gobernador autoriza a realizar actos donde se reúnen muchas personas”.
Con esos argumentos el gremio docente rechaza la iniciativa del gobernador. En cuanto al reinicio de clases de manera presencial, debate que también se abre pensando en el ciclo lectivo 2021, Guagliardo afirmó que para que eso suceda “debe haber baja o nula circulación del virus. Esos son los estándares que estableció la OMS para la presencialidad en las escuelas”. El deterioro por falta de mantenimiento de los 700 edificios escolares es otro de los argumentos de ATEN. “Las escuelas no están en condiciones” afirmó Guagliardo.
También hubo fuertes críticas por la precaria conectividad. “Con la virtualidad nuestro trabajo se deterioró considerablemente, los docentes somos los más interesados en volver a la presencialidad pero deben estar dadas las condiciones sanitarias para retornar a las aulas. Desde el punto de vista pedagógico no estábamos preparados para esta situación. Quedó al desnudo una desigualdad previa a la pandemia que es la brecha digital. El 50 por ciento de los estudiantes de la provincia han tenido dificultades y no tuvieron la regularidad necesaria para alcanzar los objetivos”, concluyó Marcelo Guagliardo.