Un nuevo incremento en los precios de los combustibles sorprendió a los consumidores por segunda vez en lo que va del 2022. En la región “el aumento oscila entre el 11 y el 14 por ciento”, según confirmaron desde la Cámara de Expendedores de Río Negro y Neuquén.
El Secretario de la entidad que representa a los estacioneros, Carlos Pinto, expresó que “es una actualización del precio muy importante, aunque veníamos observando un retraso en los valores respecto de los índices de inflación. Deberían aumentar al mismo ritmo de otros productos” de consumo masivo.
El empresario detalló que “en el último año hubo un solo aumento del 9 por ciento en el mes de enero, mientras que la inflación en el mismo período aumentó entre el 40 y el 50 por ciento anual. Este aumento era previsible aunque se aceleró por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania que llevó el precio internacional del barril de petróleo a 140 dólares. Hace un año el valor se ubicaba en 60 dólares”, afirmó.
En cuanto a las causas locales, Carlos Pinto dijo que en “los últimos nueve meses el precio se mantuvo congelado. Hubo un solo incremento del 9 por ciento en enero y el costo de los insumos y de los salarios de nuestros empleados en las estaciones de servicio han ido al ritmo de la inflación. Desde la Cámara venimos solicitando un nuevo esquema de distribución de los impuestos que componen el precio de las naftas para poder afrontar el aumento de nuestros costos. Todavía estamos desfasados”, afirmó el empresario.
La primera en anunciar la actualización fue la empresa estatal YPF. Según explicó la compañía, el aumento de precios de debe a “la evolución de las principales variables que conforman el precio de venta al público, sobre todo el aumento de los precios internacionales del petróleo y los niveles de demanda superiores a la prepandemia, que requieren importaciones para complementar la oferta local”.
