Luego de la devastadora tormenta de lluvia registrada el lunes en el norte neuquino, el gabinete provincial llegó a Barrancas para acompañar y asistir a los pobladores más afectados. El gobernador Omar Gutierrez supervisó las tareas reconstructivas y la llegada de asistencia. En diálogo con La Carretera, el Subsecretario de Estado del Interior y Gobiernos Locales, Osvaldo LLancafilo, detalló el panorama de la pequeña comunidad.
Barrancas se vio perjudicada por la caída de mucha lluvia en pocas horas. Las precipitaciones abundantes causaron inundaciones en calles y viviendas. Luego lo hizo el lodo que descendía de los cañadones. Llancafilo informó que ya llegó un camión con colchones, frazadas, módulos alimentarios y agua mineral para doce familias que perdieron todo. Además otras se autoevacuaron en casas de familiares. Los servicios de agua potable, gas y electricidad están restablecidos casi en su totalidad, mientras que las cloacas colapsaron y, por ahora, se trabaja en el drenaje de los líquidos para normalizar el servicio.
Barrancas está enclavada en una zona atravesada por unos cinco cañadones naturales, por lo que la tormenta convectiva hizo que el agua caída, buscara el cauce natural para escurrirse, atravesando la ciudad. “En cuanto a la traza urbana, hay que hacer un trabajo muy importante. Traslado de áridos y movimiento de suelo con maquinarias de Vialidad Nacional y provincial, porque se produjeron zanjones de hasta 1 metro en las calles internas“, detalló el funcionario.