Tras más de 40 días, la investigación por la desaparición de Luciana Muñoz tuvo avances significativos. Además de encontrar manchas de sangre humana en una vivienda que frecuentaba la joven, la fiscalía decidió acusar al ex novio por falso testimonio en dos declaraciones oficiales, una ante la policía y la segunda ante la fiscalía.
El sábado por la tarde se realizó la formulación de cargo a Maximiliano Avilés, ex novio de Luciana. El peluquero del barrio Parque Industrial podría haber sido la última persona que la vio y fue detenido el viernes luego de que la fiscalía lograra detectar inconsistencias en sus declaraciones que realizó ante la Policía y la Fiscalía.
En la audiencia, los integrantes de la fiscalía manifestaron que Avilés dijo que la última vez que vio a Luciana fue “un mes o un mes y medio antes de su desaparición”. Para los funcionarios judiciales, en este punto y comparando con otros testimonios, quedó expuesta una de las contradicciones. Según relato de otras personas, entre el 8 y el 10 de julio, Luciana estuvo con él.
Otra de las mentiras señaladas está relacionada con el fin de semana previo a la desaparición de la joven. Velázquez había declarado que entre el 12 y el 16 de julio estuvo en su domicilio. Para corroborar sus dichos mostró su teléfono. Sin embargo, el sistema de geolocalización confirmó que el 13 de julio por la mañana se movilizó por distintos domicilios y recorrió 7.5 kilómetros en un lapso de 11 minutos.
Por estas contradicciones es que se lo acusó por el delito de falso testimonio en dos oportunidades. Verónica Zabala, abogada de la familia de Luciana coincidió con la fiscalía, por lo que ambas partes pidieron al juez de Garantías Juan Manuel Kees la detención de Avilés por cuatro meses. “Lo que se está entorpeciendo es la búsqueda de una joven que fue pareja del acusado, que el fin de semana de su desaparición tenía golpes, y corresponde hacer una valoración con perspectiva de género”, dijo Zabala.
Este domingo, luego de un cuarto intermedio, la audiencia continuó. El juez de garantías dispuso la detención domiciliaria del acusado por cuatro meses. Además, el magistrado estableció consigna policial permanente en la vivienda donde permanecerá detenido el imputado y que, dentro del plazo de 48 horas, también se le imponga la utilización de una tobillera electrónica.
Neuquén, 25 de agosto de 2024.