Nicolás Montanari decidió realizar un cambio en busca de conseguir los resultados que hasta el momento se le negaron en la competitiva Clase 3 del Turismo Nacional. después de su abandono en la final de la prueba realizada en Paraná, decidió replantear su continuidad en la categoría. Por eso, no sorprendió su desvinculación del Nico Kern Race Car y su desembarco en el equipo de Gabriel Rodríguez.
Montanari tuvo buenos resultados parciales, pero al momento de las clasificaciones, series y finales tuvo diferentes complicaciones. Tanto en el estreno del certamen como en las resantes dos fechas anduvo muy bien en los entrenamientos, aunque después no lo pudo concretar, debido a problemas en su auto, por lo que no sorprendió que realizara un cambio de equipo en la previa a un nuevo desafío.
El Máquina Montanari no tomó antes la decisión de meter un cambio debido a una gran relación con Nico Kern y los restantes integrantes del equipo, de los que reconoció que dejaron todo para que funcionara el auto, uno de los más viejos que hay en la categorìa, pero la falta de resultados y todo lo que se pone en juego en cada prueba, por lo económico terminó siendo determinante para replantear su continuidad en el TN.
Decidido a ser protagonista en una de las categorías más importantes que tiene el automovilismo en Argentina, como es la Clase 3 del TN, el cambio de equipo y de auto le permitirá a Montanari encarar los próximos desafíos, como será la cuarta fecha del certamen que se disputará el 7 de mayo en el autódromo de Concordia, donde se presentará con un flamante Toyota Corolla del equipo de Rodríguez y los motores de Esteban Pau.
Después de las primeras tres pruebas, el piloto que representa a la Comarca de La Adela y Río Colorado se encuentra en el lugar 27 del certamen y con apenas 9 puntos, por lo que su desafío será no solo andar bien en los entrenamientos sino ser protagonista en la parte importante de cada fecha, como las clasificaciones, series y finales, a partir de Concordia con un auto que en la previa le permite ilusionarse con ser protagonista.
