El presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura, Martín Hinojosa, consideró que no es un mal momento para la producción de vinos en el país, puesto que en el marco de la pandemia se incrementó el consumo en el país y aumentaron las exportaciones.
Reconoció que lamentablemente esta mejora no llega al productor puesto el precio de la uva bajó de 14 a 10 pesos por km. Consideró que existe especulación financiera por parte de algunos compradores que prefieren invertir en ese mercado y demorar los pagos al productor primario.
Hinojosa aseguró, en el micro de producción de Raúl Ferragut por La Carretera, que las exportaciones crecieron tanto en el rubro del mosto, como en el de los vinos a granel y embotellados, en donde algunos vinos argentinos, como los de la Patagonia, logran precios diferenciales por su reconocida calidad.
“Pero el gran desafío de la industria a nivel internacional y aquí, es crecer en lo que se conoce como MERCADO DE LA SED, en donde ocupa tan sólo el 3% de las ventas”
“El rol del Instituto tiene que ser protagónico en esto, controlar la calidad y a la vez incentivar la comercialización ya sea a través de nuevos envases como así también incorporar sabores que permitan competir con la cerveza, los jugos, las gaseosas y las aguas saborizadas”.
El funcionario, luego de reconocer que se debe elaborar una estrategia con la COVIAR y junto a todos los integrantes de la industria para encarar ese desafío, no descartó la posibilidad de que hasta se pueda elaborar vino sin alcohol.