La producción de gírgolas en el Alto Valle viene desarrollándose desde hace décadas. Si bien su consumo aún no se ha masificado, crece todos los años y la región es un referente nacional en su producción y comercialización. La actividad es rentable si se aplica la metodología adecuada. Es también una alternativa interesante para el consumo familiar. Por esto, el INTA Cipolletti brindará una capacitación hoy viernes 28 de abril a partir de las 9.30 hs. El taller es gratuito y abierto para quienes estén interesados en participar.
Jorge Muñiz del INTA Cipolletti será uno de los capacitadores y anticipó en La Carretera algunos conceptos básicos del cultivo de este tipo de hongos comestibles. Aclaró primero que “básicamente la siembra del micelio en troncos de álamos se debe dejar por un tiempo incubando hasta que cuando se logran la temperatura y humedad adecuadas, fructifican. Es un cultivo altamente rentable para quien lo quiera hacer a escala comercial. Cuando el destino es para el consumo familiar, estamos sumando un alimento que en la canasta básica de la huerta no lo tenemos: la proteína”.
Muñiz informó además que “con respecto al tiempo de maduración, nosotros hacemos una siembra en las últimas semanas del mes de octubre, ahí incorporamos el inóculo sobre los troncos. Una vez que se realizó esto se deja a los troncos bajo un plástico negro, nosotros utilizamos las bolsas de consorcio. En el mes de marzo del año siguiente, si las condiciones de temperatura y humedad son las adecuadas, ese nylon se retira y se comienza a dar un riego que es como una microaspersión o nebulización. A partir de este momento comienzan a fructificar, a los pocos días ya están aptos para la cosecha”. Estas recomendaciones y tiempos se aplican para el cultivo de Pleurotusostreatus, que da una gírgola de color grisáceo que es la más cultivada en la región.
Por último, Muñiz aclaró que “para iniciarse en este cultivo no hay que tener un conocimiento previo. Con el correr de las temporadas uno va sumando elementos a partir de lo que lee y de la observación práctica. A nivel de autoconsumo no requiere mayor inversión que la compra del inóculo, es necesario tener un pequeño espacio, por ejemplo de un metro cuadrado. Allí se pueden instalar 9 troncos aproximadamente, con esto haciendo las cosas adecuadamente, cumpliendo con todos los pasos y todos los procesos, se pueden obtener aproximadamente 9 kilos durante la temporada”. Muñiz destacó la importancia de “estar sumando calidad alimentaria a la dieta diaria en nuestros platos es fundamental y no requiere una inversión importante”.