La comunidad de Neuquén se encuentra conmocionada tras confirmarse el hallazgo sin vida de Azul Semeñenko, trabajadora de la Dirección de Protección Contra las Violencias. La justicia investiga su muerte como un transfemicidio, y el hecho ha desatado una profunda bronca social, no solo por la violencia del caso, sino también por la falta de respuestas rápidas y efectivas.
La información fue dada a conocer durante una nota realizada en Rutas Argentinas, programa emitido por AM740 La Carretera, donde se entrevistó a Juliana Calvo, amiga y compañera de Azul. “No tenemos ninguna información sobre responsables. Lo único que sabemos es que su cuerpo tenía signos de violencia”, afirmó. Aún conmocionada, explicó que toda la comunidad se organizó para buscarla cuando notaron su ausencia tras varios días sin noticias.
Juliana recordó que Azul era “una mujer superresponsable, amorosa, atenta. Brillaba”. Denunció que su asesinato no es un hecho aislado y forma parte de una larga lista de femicidios y transfemicidios ocurridos en la región. “Nosotras no tenemos protección. No dejamos de ser mujeres trans y eso nos expone. No estamos exentas de nada, ni siquiera trabajando en la Dirección de Protección Contra Violencias”, sostuvo con crudeza.
También pidió respeto a la identidad de Azul ante los comentarios discriminatorios en redes sociales. “Estoy cansada de que sea 2025 y tengamos que seguir discutiendo con gente en los comentarios si era mujer o no. Esto fue un transfemicidio. Era una mujer trans con sueños, proyectos, con un trabajo como todas”, expresó. Celebró, sin embargo, el acompañamiento de vecinos y organizaciones en la marcha que se realizó el jueves.
Por el momento, las acciones futuras en pedido de justicia aún no están definidas, ya que la comunidad cercana a Azul está enfocada en despedirla. “Estamos con mucho dolor en el pecho, con bronca e impotencia. Todo lo que hagamos lo vamos a difundir por redes y medios”, concluyó Juliana Calvo.
Neuquén, 17 de octubre de 2025