Una multitud se congregó ayer en la capital neuquina para exigir justicia por el transfemicidio de Azul Semeñenko, la trabajadora estatal cuyo cuerpo fue hallado tras permanecer desaparecida por más de 20 días. La marcha, convocada por organizaciones sociales y gremiales como la CTA Autónoma y ATE, se convirtió en un potente reclamo contra la violencia de género y la transfobia.
En el centro de la movilización, la voz quebrada y firme de Marcos Semeñenko, hermano de la víctima, resonó ante los medios de comunicación y la multitud. “En memoria de ella (su hermana) les pido que no nos dejen solos, porque esto recién comienza. Se tiene que hacer justicia”, declaró, apelando a la solidaridad y el acompañamiento de la sociedad para que el crimen no quede impune.
Azul Semeñenko, de 49 años, fue vista por última vez el 25 de septiembre. La búsqueda de la trabajadora de la Dirección de Protección Integral contra las Violencias movilizó a sus compañeros y a toda la comunidad LGBTIQ+. El martes se produjo el trágico hallazgo de un cuerpo en un canal de desagüe y un día después se confirmó su identidad.
Marcos Semeñenko relató a la prensa su dolor y la certeza que tuvo desde el primer momento: “Cuando encontraron el cuerpo sabía que era ella, me senté a esperar, alguien me dijo que probablemente era Azul”. A pesar de la tragedia, el joven destacó la empatía de un comisario que se acercó a la familia.
Con una mezcla de tristeza y rabia, el hermano de Azul Semeñenko envió un mensaje claro a quienes resulten responsables del crimen: “Cada sufrimiento que ella vivió lo van a tener que pagar”.
La voz de los funcionarios
La marcha no solo sirvió como homenaje a Azul, sino también como un recordatorio urgente de la necesidad de políticas efectivas para proteger a la comunidad trans y garantizar un proceso judicial que condene el transfemicidio con todo el peso de la ley. La provincia de Neuquén llora la pérdida y exige que la justicia actúe con celeridad y perspectiva de género para esclarecer completamente este atroz crimen.
El gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, se expresó por el transfemicidio de Azul Semeñenko, cuyo homicidio se confirmó este miércoles a última hora de la noche al conocerse los resultados preliminares de la autopsia.
A primera hora de la mañana del jueves, el Gobierno de la Provincia declaró dos días de duelo. Unos minutos después, el gobernador Rolando Figueroa expresó en su cuenta de X: “Acompañamos a la familia de Azul Semeñenko, a sus seres queridos y a todo el equipo del CAV. Es un día triste y de duelo. En Neuquén no hay lugar para el odio ni para la violencia. Vamos a poner todos los recursos necesarios para que haya justicia por Azul y para que nadie más sea víctima de la intolerancia y la discriminación”.
Por su parte, la ministra de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres y candidata a senadora, Julieta Corroza manifestó que “la muerte de Azul nos duele. Como sociedad no podemos permanecer indiferentes ante ninguna forma de odio o violencia”.