El 25 de julio comenzó en todo el país la “Semana de la No Dulzura”. La campaña nació en 2019 para contrarrestar la famosa “Semana de la Dulzura” que se celebra durante la primera semana de julio. En esta oportunidad, profesionales de la salud, empresas, instituciones y organizaciones civiles, promueven la reducción del consumo de azúcar. En La Carretera dialogamos con la nutricionista Natalia Alonso (MN 7354). La especialista nos contó los principales ejes de la iniciativa.
El objetivo es tomar consciencia de que el exceso de azúcar provoca obesidad y enfermedades no transmisibles. En este sentido Alonso remarcó que “el impacto ya lo estamos viendo. El azúcar y los productos altamente calóricos son en gran parte los responsables. Todo esto lleva a la aparición de enfermedades como la diabetes”. Las estadísticas dan cuenta que en nuestro país 6 de cada 10 adultos y 4 de cada 10 niños tienen sobrepeso y obesidad. En cuanto a la diabetes tipo 2, un 13% de la población argentina se ve afectada.
La Semana de la No Dulzura invita a que probemos hábitos saludables. La meta es que la población reduzca el consumo de azúcar de manera paulatina y reeduque al paladar. La nutricionista destacó que “en nuestro país se consume el triple de azúcar de la que recomienda la Organización Mundial de la Salud”. El organismo internacional aconseja 25 gramos diarios. Alonso insistió en que la sustancia está oculta en los paquetes, por eso recomendó mirar el rotulado de todo lo que compramos. Para ejemplificar contó que “en muchos casos, está presente en alimentos que no son dulces, como una sopa instantánea”.
La especialista destacó que “por todo esto es tan importante que salga la Ley de Etiquetado Frontal. Hoy las empresas solo están obligadas a nombrar el tipo de azúcar que lleva el producto, pero no la cantidad. Además, no siempre aparece con el nombre de azúcar. También aparece como JMAF, jarabe de glucosa, dextrosa o sacarosa, entre otros nombres”. Esto explica la elección del lema 2021: ¡El azúcar oculta, al frente!
La última semana de julio no se eligió de manera arbitraria. La fecha coincide con las vacaciones de invierno, un momento de ocio y recreación para las familias. Por eso proponen que los chicos entren a la cocina de casa para preparar recetas dulces pero caseras. Alonso invitó a usar productos naturales para endulzar, como las frutas. Concluyó que el propósito de la campaña no es eliminar el azúcar sino reducir su consumo.
