Carlos Banacloy, ministro de Desarrollo Productivo de Río Negro, fue categórico: la flexibilización del Senasa para permitir el ingreso de carne con hueso a la Patagonia es un retroceso. En diálogo con AM740, cuestionó la resolución y alertó sobre las consecuencias a nivel sanitario, económico y comercial. “Es un parche dirigido a beneficiar a frigoríficos de exportación, sin plan a mediano plazo“, aseguró.
Banacloy explicó que la decisión habilita únicamente el ingreso de asado con hueso plano, en envases específicos y desde plantas de exportación, lo cual limita su alcance. Sin embargo, advirtió que abre una puerta peligrosa para el estatus sanitario diferencial que ostenta la Patagonia desde hace más de dos décadas. “No podemos aceptar algo que ni siquiera Europa compra, porque tiene estándares más estrictos”, argumentó.
Según el funcionario, la medida responde más a una presión de mercado que a una estrategia técnica, y recordó que todas las provincias patagónicas —incluidas Río Negro y Neuquén— habían solicitado otro tipo de flexibilización: la integración sanitaria con provincias vecinas como La Pampa, en vez de imponer un cambio unilateral desde Nación. “Lo que falta es un plan nacional serio, no una resolución aislada“, enfatizó.
Respecto al impacto en los precios de la carne, Banacloy desestimó que la resolución genere un descenso. “Hoy el 65% de la carne que se consume en la Patagonia proviene del norte del país. La barrera no prohíbe su ingreso, sólo restringe algunos cortes con hueso. Lo que encarece es la logística, no la sanidad”, explicó. Además, aseguró que el ingreso de carne con hueso no cambiará las dinámicas del mercado ni aliviará el bolsillo de los consumidores.
El ministro también planteó su preocupación por las exportaciones patagónicas, como las de genética animal a Chile, que podrían verse afectadas. “Si perdemos el estatus sanitario libre de aftosa sin vacunación, también peligran las frutas que hoy vendemos al mundo. La sanidad es un activo estratégico”, remarcó. Comparó el modelo argentino con el de Brasil, que planificó durante 10 años su salida del esquema de vacunación con éxito.
Banacloy adelantó que esta semana se reunirá con otros ministros provinciales y con la Secretaría de Agricultura en Buenos Aires para insistir en la necesidad de una política sanitaria integral. “Esto no es contra un gobierno, es contra la falta de planificación histórica. Hoy las decisiones se toman desde el centralismo, sin entender la realidad climática ni productiva de la Patagonia“, concluyó.
Río Negro, 30 de junio de 2025