La tormenta de los últimos días en el norte de la Patagonia provocó múltiples inconvenientes en la región. El gerente general de ARSA, Claudio Céliz, confirmó que en la madrugada de este jueves “se incrementaron los índices de turbiedad y podría faltar agua en algunas localidades del alto valle”.
Las fuertes tormentas de esta semana arrastraron sedimentos en el río Negro que afectaron a las plantas potabilizadoras y los filtros rápidos. En General Roca “se redujo la producción de agua en un 30 por ciento y se debió parar la planta por los altos niveles de turbiedad. En Cipolletti, Allen y Fernández Oro la provisión se normalizó”, dijo el funcionario.
Los sistemas cloacales también presentaron inconvenientes. Claudio Céliz afirmó que “se han construido viviendas que además de tener conectadas las cloacas a la red de ARSA también han vinculado los pluviales domiciliarios a ese conducto principal cuando debieran descargar en el cordón cuneta. Toda la basura que escurre por efecto del agua de lluvia va al sistema cloacal y colapsan las redes”, concluyó el gerente de Aguas Rionegrinas.
