Desde hace 15 años, la Comisión Pro Tren del Valle ha estado en la vanguardia de la lucha por la restauración del servicio ferroviario en la región. Lorenzo Brevi, es uno de sus cofundadores y uno de quienes han abogado incansablemente por la reinstauración de rutas clave que conecten diversas localidades, brindando un transporte seguro y eficiente para los habitantes del Valle. Solo se logró, hasta el momento el tren entre Cipolletti y Plottier, pero hace dos años que el primer tramo fue suspendido por cuestiones de seguridad poco comprobables.
El proyecto completo propuesto abarca trenes desde Chichinales hasta Senillosa, desde Barda del Medio hasta Cipolletti, y desde Constitución hasta Zapala, siendo este último tramo especialmente relevante por su histórico vínculo comercial y social.
A pesar de los esfuerzos, el progreso ha sido lento y desigual. Mientras que Neuquén ha avanzado con las obras requeridas por el Ministerio de Nación, como la construcción de apeaderos, Río Negro ha enfrentado obstáculos políticos e institucionales que han frenado el avance del proyecto.
La falta de voluntad política tanto a nivel nacional como provincial ha generado preocupación entre los defensores del tren del valle, quienes temen que el proyecto se estanque definitivamente: “la orientación política de este nuevo gobierno (nacional) nos indica que las cosas se van a poner más difíciles. Estamos muy preocupados porque creemos que puede caer definitivamente el proyecto del Tren del Valle”, confió el representante de la comisión.
La afirmación de que el tramo entre Cipolletti y Neuquén es inviable técnicamente ha sido rebatida por Brevi, quien argumenta que medidas simples, como la instalación de arcos de control, podrían resolver los supuestos problemas de seguridad. “Lo de Cipolletti es una falsedad técnica, el intendente anterior de Cipolletti no tenía una predisposición para resolver el tema, el tema se resuelve fácilmente porque se pueden poner arcos de control y de prohibición de paso”, señaló Brevi.
“El puente nunca se rompió, tiene una flexibilidad de un metro que se desplaza pero se vuelve a poner en 15 minutos. De hecho la prueba fehaciente es que pasa el tren de carga con 50 vagones. Se aduce una cuestión de seguridad inexistente porque la seguridad tiene que ser tanto para el tren de carga como para el de pasajeros”, destacó
El impacto positivo que tendría la reintroducción del tren del valle es innegable, no solo en términos de conectividad, sino también en la reducción del tráfico en la congestionada Ruta 22, donde los accidentes son lamentablemente frecuentes. Precisó que el tren puede transportar 3.000 pasajeros por día y que eso podría reducir el tránsito por la ruta en un 20 o 30%
En un último esfuerzo por impulsar el proyecto, la Comisión Pro Tren del Valle ha presentado un recurso de amparo declarando el transporte como un derecho humano fundamental, en la esperanza de que esto acelere su implementación. “Es la última jugada que hicimos, porque las esperanzas no son muy alentadoras”, remarcó Brevi.