Martín Torres es un músico argentino que vive en España. Por segunda vez contó su experiencia a LA CARRETERA, primero cuando recién explotaba la pandemia en Europa, y ahora, luego de una progresiva apertura y la posterior necesidad de reimplementar medidas preventivas.
“Ha sido un paso para adelante y otro para atrás”, así graficó Martín este momento.
Aclaró que “el relajo y el descuido uno lo hace sin querer” y se puso él mismo y a su familia como ejemplo. “Nosotros nos hemos cuidado mucho, hemos hecho todo tal cual se nos ha pedido, a la perfección, nuestros niños no han salido ni a la calle, pero luego vas perdiendo la costumbre y la atención. El alcohol en gel me olvido de usarlo y a veces salgo sin ponerme la mascarilla (tapa boca) siendo que nuevamente nos exigen ahora tener que usarla”.
Dijo no estar de acuerdo con aquellos que marchan en contra de las medidas restrictivas, luego dE aclarar que respetaba todas las ideas, expresó “que yo ande con mascarilla no perjudica a nadie, pero los que no la llevan pueden contagiar a muchos”.
“Las estadísticas claramente marcan que haber estado en cuarentena ha tenido sus buenos resultados, estas últimas semanas hubieron 30 mil casos por no habernos cuidado tanto”.
Esto lo dice alguien que se ve afectado por el aislamiento puesto que, como músico, prácticamente no puede trabajar.
Sí pudo participar de un recital en una plaza de toros, pero la experiencia fue muy particular, “el espacio estaba limitado con una separación de más de 2 metros entre butacas, uso obligatorio de mascarillas, se le tomaba la temperatura a todo el mundo, alcohol en gel por todos lados, un poco raro pero tenemos que adaptarnos”.
Martín seguirá viviendo con su familia la experiencia pandémica en una España que, como aquí y en todo el mundo, muestra sus diferencias entre quienes apoyan el aislamiento y quienes lo consideran innecesario.
Será así hasta que podamos utilizar “la vacuna”.
