Ayer por la tarde se activó un operativo de búsqueda y rescate. Dos hermanitos fueron arrastrados por la corriente. Se bañaban en la zona de El Arroyón, un sector peligroso donde se prohíbe nadar. La nena pudo ser rescatada por personal de bomberos y Defensa Civil. La búsqueda se extendió para dar con el niño, que finalmente fue hallado a la altura del balneario. A pesar de los esfuerzos, el pequeño no respondió a las maniobras de reanimación.

En La Carretera dialogamos con Jorge Riffo, responsable de Defensa Civil del Municipio de Allen. El funcionario reiteró que esta zona del río Negro no está habilitada y cuenta con cartelería que advierte a los visitantes. “Lamentable lo sucedido, sabiendo que son lugares peligrosos. Estaban los chicos y varias familias más. Al chiquito lo atrapó el pozón. Es una zona peligrosa, tiene cartelería de prohibición. Hay una parte que la llamamos ‘la olla’ que es aproximadamente 20 metros con una profundidad de hasta 11 metros. Ahí la correntada es fuerte y los remolinos también. Según los testigos, los chicos venían caminando de un sector bajo y se toparon con el pozón y no pudieron salir”, afirmó Riffo.

“Tenía 10 años el nene. Fuimos alertados aproximadamente a las 17.30 y empezamos con el protocolo de búsqueda y rescate. Pasados unos minutos, nos alertan que el cuerpo estaba a media agua a la altura del balneario. Realizamos RCP y se trasladó al Hospital. Poco se pudo hacer, estuvo mucho tiempo bajo el agua. Estaba sin signos vitales”, relató Riffo. Cada año, la policía y Defensa Civil refuerzan el mensaje de no bañarse en El Arroyón. A pesar de las advertencias, muchas familias eligen instalarse a pasar el día en este lugar. “Estaban con mayores, con la familia completa”, aseguró.

Riffo recordó que sólo está permitido bañarse en el Balneario Municipal, que cuenta con servicios como sanitarios, parrilas y también guardavidas. “Todos los veranos hacemos operativos de prevención, alertando sobre la peligrosidad de bañarse en otros sectores del río. Lamentablemente, este menor, sin saber, tuvo el peor final. Nos duele mucho cuando se trata de un menor. Tenemos que inculcar esto desde la casa. Tenemos que saber donde van los chicos a bañarse y alertarlos para no tener que hacer estos rastrillajes”, expresó. “Está bien marcado, la cartelería es bastante grande. Los papás de los niños estaban en el lugar. La hermanita que alcanzó a salir estaba con mucho nerviosismo y se llamó una ambulancia para atender a los familiares”, sentenció el director de Defensa Civil.